Frijoles de la Olla
Los frijoles de la olla
Son un platillo típicamente mexicano que se sirve prácticamente en todas las mesas mexicanas. Una característica importante de los frijoles de la olla, es su gran versatilidad, pues los frijoles de la olla los puedes comer directamente sacados de la olla con unas tortillas calientitas o bien te pueden servir como base para platillos más elaborados y son el acompañante perfecto para prácticamente cualquier guisado.
La buena comida no se hace de manera instantánea y los frijoles de la olla no son la excepción, para que estos queden realmente ricos, debes cocerlos a fuego lento por un promedio de tres horas., debes de cuidar que el agua de la olla no se evapore y si es necesario debes de agregar más.
Realmente no importa que clase de frijoles uses para preparar los frijoles de la olla, puedes usar frijoles pintos, negros o cualquier variedad que te guste el principio de preparación es el mismo y tu imaginación es el límite.
Los frijoles
Son fuente de carbohidratos complejos, proteína, vitaminas, minerales y fibra. Además, tienen un bajo contenido de grasa y, por ser un alimento de origen vegetal, no tiene colesterol. En relación con las vitaminas, los frijoles son fuente de tiamina, riboflavina, niacina y ácido fólico.
Las tres primeras son necesarias para la producción de energía. Por su parte, al ácido fólico es fundamental para la formación y maduración de las células, por lo que es fundamental antes y durante el embarazo, para prevenir defectos del tubo neural.
- 1 Libra o un kilo y medio de tus frijoles favoritos
- 2 cucharadas de sazonador de pollo
- ½ cebolla con el rabo cortado
- 1 cabeza de ajos
- 3-4 ramas de epazote
- 1 chile jalapeño grande
- Sal al gusto
- La suficiente agua para cobrir los frijoles por aproximadamente 2 pulgadas o 4cm.
- En una cacerola grande agrega los frijoles y cúbrelos con la suficiente agua para que esta sobresalga aproximadamente 2 pulgadas o 4 cm.
- Agrega el sazonador de pollo, la cebolla, el ajo y el epazote.
- Ponlos a calentar a fuego alto sin tapar hasta que estos hiervan, una vez que llegan al punto de hervor, revuélvelos, agrega la sal y revuélvelos nuevamente, cúbrelos y disminuye la temperatura a fuego lento.
- Déjalos cocinar por las siguientes dos hora y agrega agua si es necesario y déjalos cocinar por una hora mas.
- Sírvelos calientitos acompañados de jitomate y cebolla picada.
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